sábado, 31 de julio de 2010



Este silencio atemoriza ..

jueves, 29 de julio de 2010

El ruido de la monotonía.

Haría cualquier cosa por no tener que volver a la rutina del día a día otra vez, y que la monotonía me vuelva a atrapar.

Quisiera pasar los días como lo hago ahora, sin preocupaciones, relajada, oyendo buena música y viendo grandes películas. Pasar el tiempo con mis amigos y tener constantemente la sensación de estar perdiendo el tiempo de manera irremediable, pero no importa para nada porque no hay nada más que hacer.

Pero bueno, supongo que eso es imposible, el tiempo pasa y lo hace por mí también, cada día requerirán de mí más responsabilidad y más madurez, y creo que perder le tiempo de esa forma no es símbolo de esas dos cosas.

Parece que tarde o temprano terminaremos siendo cada uno lo que no queremos ser, supongo que todos acabaremos siendo presos de una hipoteca y un trabajo que, aunque nos gusta (o eso espero) nos oprime, no hay forma de zafarse de eso.

Ahora mismo me imagino mi vida, como quiero que sea, y me encanta, pero ¿cómo sería en realidad? No sé si quiero saberlo, quizá me decepcione a mi misma.

viernes, 23 de julio de 2010

¿Cuántas veces lloré buscando en mis lágrimas una respuesta?
Han sido muchas las veces en las que en la embriaguez de mi soledad he indagado en mi interior y he descubierto cosas que no me gustaban, y lo peor de todo esto es que son cosas totalmente sinceras, es imposible que algo que piense en ese estado sea erróneo, imposible sencillamente.
A menudo siento miedo, miedo por no saber quién soy, ni qué busco, qué espero de esta vida, de la gente...no lo sé, la respuesta a todo es un simple no lo sé. Hasta que me encuentro a solas con el ron, y mi vida pasa ante mis ojos, toda la reladidad se muestra sin perjuicios, y es entonces cuando siento miedo...

jueves, 22 de julio de 2010

Dedicado.

Vivir es algo más fácil de lo que suelen creer, a menudo el ser humano se empeña gravemente en complicar su existencia con absurdas patrañas mentales y pasar días, semanas e incluso meses al borde de un suicidio emocional solo entendible por su persona.
No merece la pena.
A lo largo de mi vida he conocido a muchas personas, cada una un mundo, unas más atractivas que otras, y no me refiero al físico, hablo del contenido en si, y todas, absolutamente todas parecen caer presas de esa situación en algún momento de sus vidas.
Yo he sido así, lo reconozco, me he torturado durante años créanme, y ahora que llegué a un punto en el cual comprendí que es lo importante, algo va mal, y no conmigo, yo sigo bien, es la gente.
Hacer lo que quieres cuando quieres y si algo va mal, borrar esos trazos, es imposible, sienta mal, así de simple. Nunca seremos libres completamente, siempre vamos a estar en el punto de mira de los que están a nuestro alrededor, quieran ellos o no, posiblemente siempre hagan daño. No hay salida por lo que veo, y si la hay se esconde.
Y si hablamos de dos, ahí la cosa se complica enormemente, vuelvo a hablar de las personas y sus necesidades. Es inútil negarlo, cada uno necesita una persona a su lado, alguien con quien poder estar, amar, apreciar, respetar, vivir, y todas esas cosas sí, pero en el mundo en el que vivimos todo pierde su esencia, todo se desvía, esa necesidad con frecuencia se convierte en obsesión, o por el contrario, es una necesidad tan ínfima que hace daño.
¿Se dan cuenta de lo que hablo?
Nadie está a gusto con lo que tiene, siempre buscamos mejorar y resulta que de esta forma nos jodemos, hablando mal y claro, no sé si es la sociedad en sí o en que va, pero nos hemos convertido en seres cada vez menos racionales y más egoístas, empleamos nuestro tiempo en hacernos daño mutuamente, y esto sí que es un suicidio a largo plazo, y no el "teatro".

domingo, 11 de julio de 2010

Cierro los ojos y me dejo llevar pero me tropiezo con tanta oscuridad.
Mis pies andan solos, sin un rumbo fijo, pero no me hace falta. Me limito a vivir.
Y si me caigo, el silencio me mece hasta hacerme olvidar el golpe.
Y así día tras día, noche tras noche, y llega el Sol, desde una playa veo amanecer a solas.
Es otra promesa, es otro grito a la esperanza.


No necesito más; mi falsa felicidad, mi libertad como pilar.